Hoy os voy a hablar de mi perrita Kiky. Es una linda chihuahua que compré hace aproximadamente un mes. Es la perrita más cariñosa e inteligente del mundo.

Por las mañanas, me sigue por todo el piso mientras me estoy arreglando. Me mira y parece que me dé el visto bueno a cómo me visto, me peino y me maquillo.

Cuando ve que me acerco a la puerta de la calle, se para a una cierta distancia y se queda mirándome con carita de pena. Me despido de ella y lanza un ladrido, como si me contestara.

Al volver a casa, en cuanto salgo del ascensor ya la oigo correr hacia la puerta. Lo primero que hago es bajarla al parque y jugar un rato con ella. Cuando volvemos a casa, preparo la cena para las dos, y después se acurruca conmigo en el sofá hasta que nos vamos a dormir.

¿A qué es una preciosidad?