jueves, 13 de septiembre de 2012



Estos días del juego "Adivina el personaje" han sido muy ajetreados, porque, aparte del juego, la vida seguía: el lunes tenía que presentar mi artículo sobre los rincones especiales de LP a la redactora jefa de la revista, y el curso de arquitectura que estoy haciendo por las tardes no es nada fácil. Además, las fiestas no paran en LP, como ya sabeis. El domingo día 9 era el cumpleaños de Yuliana..... y organizó una fiesta vaquera, con música country, barbacoa y mucha diversión. Y el lunes 10 cumplían años Yaniengel y Marta19_96. Yaniengel hizo una fiesta de heroínas y villanas y Marta19_96 una de disfraces, así que aproveché el mismo traje y me pasé por las dos fiestas disfrazada de mi villana favorita: Cruella de Vil.
Mike se había marchado el domingo de viaje. Quería ir a ver unos coches de coleccionista que subastaban. Se encaprichó de uno de ellos y se quedó hasta el martes, que era el día de la subasta, y volvió ayer por la tarde.
Mi artículo ha sido todo un éxito. A mi jefa le encantó, aunque me pidió algunos retoques en el texto y cambiar un par de fotos. Pero ya se lo volví a presentar ayer y ¡lo publicarán en el número especial de septiembre! que sale a la venta el sábado.
En el curso de arquitectura coincidí unos días con Anusky, pero ella ya lo ha terminado. Además, se ha marchado y no sé nada de ella. Supongo que andará celebrando su título de arquitecta con su novio Daniel. La que también está en el curso es mi amiga Xema. Así que, aunque sea un curso duro y difícil, me lo paso muy bien en las clases con ella.
Ayer por la noche, cuando salí de clase, Mike estaba esperándome en la puerta para invitarme a cenar. Pasamos un momento por mi casa para darme una ducha y cambiarme y nos fuimos a cenar. Estaba entusiasmado con el coche de colección que había comprado. No paraba de hablar de eso y casi me quedo sin ocasión de explicarle lo de mi artículo. Pero cuando por fin me dejó hablar y se lo conté, se alegró un montón y pidió una botella de champagne para celebrarlo. Fue una cena tan agradable que ni nos dimos cuenta de que estaban cerrando el restaurante! Dimos un paseo y acabamos entrando en el club a bailar un rato. Total, que llegué a casa tardísimo y tenía ropa tendida por recoger, los platos limpios en el lavavajillas por guardar, vajilla sucia por poner en el lavavajillas, ... ¡¡¡Esta mañana no había quién me levantara de la cama!!! Y si no me creeis, mirad la pinta que tenía ...

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