martes, 28 de agosto de 2012

Qué duro volver al trabajo después de tres semanas de vacaciones!!! Y, además, de vacaciones intensas! Porque no he parado: al Caribe, a la playa y a Inglaterra!!! Pero bueno, no me voy a quejar. Me encanta tener un trabajo interesante como el de la revista!
Mi jefa me ha llamado nada más llegar y me ha dado una noticia excelente: voy a escribir un artículo en una revista especial que sacamos a mediados de septiembre!!! Seguiré ayudando a una de las periodistas en la búsqueda de fotos de sus artículos para los números semanales de la revista, pero tengo que empezar a preparar un artículo sobre lugares curiosos en LP, del que me voy a encargar del texto y de las imágenes. Estoy contentísima, porque eso quiere decir que he hecho un buen trabajo y que voy a tener una oportunidad de demostrar que también puedo escribir.
Cuando he llegado a casa, tenía unas ganas locas de contárselo a alguien. Ya sabeis que Lucas no está, que se ha ido a Cuba a ver a su familia y no vuelve hasta mañana por la noche. He ido a ver si Anusky y Pati estaban en casa, pero no he encontrado a ninguna de las dos. Al final he llamado a mi hermano Alex y se lo he contado a él. Después he salido a pasear a Flash y a Kiky y al volver tenía un mensaje de Lucas.
Le he llamado y nos hemos pasado una hora al teléfono hablando. La conversación ha sido muy civilizada pero al final hemos decidido romper nuestra relación. No ha sido dramático ni traumático como con Gary, sino todo lo contrario. De hecho, creo que podemos seguir siendo más o menos amigos. Pero lo que está claro es que mañana, cuando llegue de La Habana, pasará por casa a recoger sus cosas y se marcha (creo que a casa de Alejandro provisionalmente mientras encuentra un piso para alquilar). No ha pasado nada en especial, pero la chispa del principio había desaparecido y estábamos en una situación de esas que, si hubiéramos seguido igual un tiempo más, seguramente habríamos acabado fatal. Así que, los dos hemos estado de acuerdo en que lo mejor era dejarlo ahora, ... sin rencores.

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